Habitualmente el deseo de adquirir conocimiento surge de una necesidad. Si no controlamos la ansiedad que esta necesidad nos provoca podemos caer en el error de querer aprender rápido, cuando lo realmente importante es aprender bien.
Siempre, ante cualquier acción por nuestra parte, lo primero es conseguir ser eficaces, es decir, lograr nuestro objetivo. En un segundo orden de importancia viene la eficiencia, es decir, conseguirlo empleando la menor cantidad de recursos y tiempo posibles.
Existen situaciones que nos obligan a buscar un equilibrio entre aprender bien y hacerlo rápido. Por ejemplo, si tenemos una fecha límite. En ese caso, si no se consigue a tiempo no se lograría el objetivo final. Por tanto, si nos encontramos en una situación que limite el tiempo disponible, tendremos que aprender rápido, pero posteriormente habrá que revisar la materia en cuestión, ya que muy probablemente hayamos dejado lagunas que minen nuestra comprensión y capacidad de emplear los conocimientos adquiridos para solucionar problemas, especialmente si son nuevos o imprevistos.
El aprendizaje únicamente es útil, si nos ofrece la capacidad de emplear los conocimientos cuando sea necesario, es decir, para solucionar problemas, enseñar a otros, etc. En muchas ocasiones la vida nos pone en situaciones imprevistas, en las que hay que dar un enfoque distinto al habitual para lograr algo. En estos casos, tendremos que ser creativos, buscar entre toda la “librería” de conocimientos que albergamos y obtener un método que nos resuelva la cuestión.
Partiendo de lo anterior, se puede deducir que el buen aprendizaje debe aportarnos, al menos, lo siguiente:
El conocimiento es jerarquizado y relacionado.
Hay que ver el conocimiento como un árbol, donde el tronco más grueso que las ramas sirve de fundamento u agarre a estas, que a su vez serán soporte a otras más finas hasta llegar a las hojas que representan el mayor detalle de una cuestión particular. Si no se dominan primero los principios fundamentales, nuestro conocimiento no tendrá de donde sustentarse.
Comprender una materia requiere de tiempo y dedicación. La manera en que obtenemos la información que queremos entender afecta a nuestra comprensión, nuestros conocimientos previos también.
Si hay algo que no comprendes solo hay un camino que seguir:
Por supuesto, una misma cuestión se puede aprender y/o enseñar de distintas maneras, si te atascas y hay algo que no comprendes, busca nuevas fuentes de información que te den una visión alternativa. Tu imaginación también es útil, trata de visualizar de manera alternativa lo que estudias, busca similitudes y relaciones con otras cosas que conozcas y comprendas.
Como es de suponer, un mismo fundamento (tronco) puede dar soporte a varias materias distintas (ramas), por lo que si comprendes y recuerdas uno te puede servir para dominar varias materias distintas pero relacionadas.
Si vemos los conocimientos sobre una materia concreta como un árbol, cada campo del conocimiento que dominemos supondría un árbol distinto. De este modo, todo nuestro saber formaría un bosque de árboles que se entrecruzan (conocimientos relacionados) y se dan soporte unos a otros.
La creatividad es la solución de problemas a partir de ideas aparentemente no relacionadas.
Si contamos con un vasto bosque (con muchos campos de conocimiento) de fuertes árboles (donde dominamos los fundamentos), seremos capaces de encontrar y comprender las relaciones (no muy obvias) que existen entre ellos.
Start by thinking of a specific subject you want to learn faster, like a language or a musical skill. You need something specific for this four-step process to make sense.
A lot of people don’t learn faster because they feel like they already know the information. But your mind is like a parachute; it only works when it’s open. Forget about anything that’s not urgent and important. You can’t multitask. If your brain is thinking about 4 different things, you’re not fully present – so you won’t learn ‘kwik’ly. Forget your limitations. These are beliefs like your memory isn’t good, or you’re a slow reader, or you don’t have the right education to learn. But if you fight for your limitations, you get to keep them. Your memory isn’t fixed, and it is possible to remember hundreds of words and numbers the way I do onstage.
How can you be more active in your learning? Ask questions. Take notes. The more active you are, the more you will learn.
Many of us don’t remember what we learned in school because the umbrella emotion for most people in school was boredom. You are the only person in control of your state. How can you improve your state? Change your posture or your body or breathing. Sit or stand the way you would if you were totally energized. Think about how you’ll benefit from the information. All learning is state-dependent.
Choose states of joy, fascination, and curiosity. Sell your cleverness for bewilderment – Rumi.
If you had to give a presentation on what you’re learning today, you would learn it differently. You would pay closer attention. You would take more detailed notes. You would ask better questions.
Esta técnica está considerada como un medio de estudio que nos permite la comprensión de la información. El desarrollo de esta técnica nos permite disminuir el tiempo de estudio y aumentar la habilidad para comprender la información esencial.
Para llevar a cabo la comprensión de un texto al leer, es necesario relacionar los conocimientos nuevos con los conocimientos previos y clasificar y recordar de forma sistemática los nuevos conocimientos.
La técnica SQ3R pretende lograr ese nivel de comprensión que nos permitirá llegar a un estudio inteligente. Comprende 5 fases:
Question (Preguntar) Leer con el propósito de responder alguna pregunta: ¿quién?, ¿qué?, ¿cómo?, ¿cuándo? y/o ¿dónde? Esta parte obliga a pensar y a organizar los conocimientos que se adquirieron con la exploración.
Practicar.
La recitación puede considerarse un método anticuado, pero esto no significa que se debe repetir palabras por palabra. Debemos evitar memorizar algo aisladamente como una unidad sin sentido.